jueves, 13 de septiembre de 2007

Lo quise como yerno

Josu Jon Imaz se despidió por sorpresa de la política ayer. Hasta aquí la noticia. Los motivos los explica en una carta que, a estas alturas todos habremos leído u oído hablar de ella. Pero sólo él conoce cuáles de ellos fueron los que más pesaron.

Ahora es el momento de afilar cuchillos, como han hecho algunos medios que creen ver el principio del fin del PNV. Pero yo no estaría tan seguro. No obstante y por curioso que parezca, la llave la tiene Egibar.

Si éste insiste en ser presidente del EBB la disputa está servida, pero también su fosa política cavada. Imaz ha creído ver que es el momento de pasar página, pero no sólo de su presidencia, sino de esa época de desgaste en la que todo el mundo insistía en verle peleado con el resto del partido.

Nada más lejos de la realidad: Josu Jon se retira absorbiendo todo el conflicto interno y con más apoyo que nunca a su persona y su proyecto, tras haber comenzado una renovación en el PNV que deja la puerta abierta a un perfil de político más técnico que intuitivo y más teórico que de empuje, y siendo el yerno deseado por todas las amatxus votantes del PNV (y alguna otra que no).

Además, en la última parte de su breve mandato demostró su olfato cuando puenteaba abiertamente a un Patxi López al que ni Zapatero hace ni hará caso, como ha quedado constatado tras lo sucedido con el PSN. Y antes, fue un activo eurodiputado y uno de los vertebradotes principales de Galeuscat, seguro del peso de los nacionalismos históricos dentro de España y su viabilidad como motor de progreso.

Y por si fuera poco, un servidor fue testigo de cómo no descuida a los jóvenes talentos ni las tendencias o ideas que surgen desde la base, incluso de la no afiliada.

Cuando baje la marea, parece que será Iñigo Urkullu (del que tengo muy buenas referencias) el que quede en la playa. Desde luego, un tipo inteligente y continuista con la línea de Imaz, pero también con ideas propias y que demuestra con sus actos las ganas de los afiliados de ver un partido unido.

Para un pro-teórico como yo (a la fuerza ahorcan), ha sido un auténtico placer tener el panorama de mi tesis a un doctor con más galones académicos que varios ministros juntos, y más carrera política (y más variada) para su corta edad que el propio Zapatero (o José María Aznar).

Seguro que le vamos a echar de menos. Seguro que él también extrañará tanta actividad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy muy de acuerdo en lo infravalorado que ha estado Imaz. talento desperdiciado. pero no entiendo que una jugada tan obvia esté funcionando. Imaz fue puesto por Urkullu, ha servido de hombre de paja y colchón contra el sector de Egibar. Una vez quemado se lo han sacado de encima para aparecer como candidato de unión. Y eso es todo. Un politico muy inteligente este Urkullu, capaz de dejar en la estacada a cualquiera para salvar su imagen, como nos hizo en Basauri. No me inspira confianza.

Anónimo dijo...

Bueno, anónimo, yo disiento. ¿Qué quieres que te diga? Si ambos coincidimos en que Imaz tiene talento y es un tipo inteligente, me cuesta creer que se haya dejado manejar por Urkullu. Tal vez hayan funcionado como un equipo. No lo sé. La cosa es que yo veo la jugada de otra manera.
Gracias por tu comentario.
Un saludo