Siempre está flotando en el aire la misma pregunta: ¿si ETA habla continuamente de territorialidad y de una Euskal Herria formada por las actuales Euskadi, Navarra e Iparralde, en el departamento francés correspondiente a los Pirineos Atlánticos, por qué su actividad se centra, sobre todo, en el Estado español?
Una de las posibles respuestas nos la dieron la semana pasada, cuando anunciaron que la fiscalía gala puede solicitar cadena perpetua para los últimos miembros detenidos en el país europeo más cercano.
Así es cómo los franceses se quitan de en medio a estos vascos.
Hasta el momento, los miembros de ETA se dejaban coger en Francia, donde tampoco levantaban tanta polvareda, siempre con una pistola o algo que pudiera constituir un delito de tal modo que eran detenidos allí, y no en España, donde las condenas eran más duras.
Pero las cosas han cambiado, y el horno de la seguridad europea no está para los bollos de terrorismos de medio pelo (lo que en Francia siempre han considerado que ETA hace).
Pero las cosas han cambiado, y el horno de la seguridad europea no está para los bollos de terrorismos de medio pelo (lo que en Francia siempre han considerado que ETA hace).
Uno, que es un optimista antropológico sin remedio, siempre cree en el arrepentimiento y en la reinserción de todos los presos, por eso se sitúa en contra de la pena de muerte o la cadena perpetua (que se revisará cada cierto tiempo). Así que espero que la justicia francesa enseñe de qué es capaz pero se mantenga suficientemente cuerda y les dé, como a todos, una segunda oportunidad después de cumplir su pena.
(en la fotografía aparece el cartel de apoyo a la selección francesa que hizo el ayuntamiento de París el pasado mundial de Alemania)
No hay comentarios:
Publicar un comentario