Baketik

Estos días he tenido la suerte de asistir a un curso sobre Elaboración ética de conflictos organizado por Baketik e impartido por Jonan Fernández. un Tolosarra que lleva mucho tiempo viviendo la causística de Euskadi desde la parte constructiva, y cuyos dos últimos proyectos: Elkarri (ya finalizado y que vivió la etapa más sanguinaria de ETA y la más inmovilista del Gobierno de Aznar) y el propio Baketik, han constituido dos iniciativas de gran éxito entre tanta noticia pesimista que producía la actualidad vasca.

En el trato, Jonan es tímido, pero delante del proyector es cuando demuestra que ha aprovechado el tiempo y las experiencias que ha vivido en la vanguardia social del conflicto vasco.

Efectivamente, no es el único que ha hecho o hace algo (ahí está Gesto por la paz) y es que, como él mismo expone en el curso, la intervención ha de sucederse entre varios mediadores. Ahora Jonan, dentro de Baketik, se ha reconvertido en formador, dando un curso de resolución que, en principio, podía parecer otro de esos de trabajo en grupo que dan deportistas de élite retirados a ejecutivos en programas de reciclaje.

Pero no. El curso se asienta sobre el mosto extraído de las mejores uvas de la conflictología. Y su valor no reside tanto en la novedad de lo que cuenta, sino en la novedad de la disposición de los elementos. En definitiva, de su discurso trabajado con las herramientas que le ha proporcionado leer, hablar, escuchar y colaborar con los mediadores más relevantes de conflictos tan duros como el vasco.