sábado, 25 de octubre de 2008

Desde el aeropuerto de DF



Los chilangos (o "defeños", que es otro modo de referirse a los de la capital de México) han "perdido" mi avión a Madrid y, aunque aún no me siento como Tom Hanks, no creo que me falte mucho. Por suerte, hay Wifi y no estoy solo.

Eso sí, he tenido tiempo para hacerme algunas preguntas como: ¿por qué las cosas están el doble de caras dentro de los aeropuertos? ¿Por qué no hay un restaurante decente? ¿Por qué en las farmacias venden chicles? ¿Por qué hay que sacar el portátil de la funda al pasar por el arco? ¿Por qué hay Wifi y no hay agua?

Y la mejor: ¿por qué dan tiempo a los pasajeros a pensar demasiado, como yo? ¿Acaso no ven que, cualquier día puede estallar una revolución?

De todos modos, lo mejor, la foto: sacada con la webcam de mi ultraligero.

1 comentario:

marielo dijo...

Era eso, una artimaña mexicana para hacerlos quedarse.
Finalmente supongo que todo bien, espero que me escribáis para saber cómo llegaron y si sus 100 kilos de equipaje llegaron completos.
Los extraño y mucho. Hoy pensé en llamar, pero olvidé que ya nos separan 8 horas de nuevo y que seguro estaríais dormidos y agotados.
Ya sabes, los quiero mogollón (como los indios de Paquimé), sube pronto tus fotos, que recordar es vivir. Un beso grande para ambos